Siempre he pensado que cada libro
que adquirimos, de alguna manera, tiene un trasfondo, una historia de cómo, cuándo
y/o por qué decidimos hacernos de ellos y sumergirnos entre sus páginas, los
míos no son una excepción, y en esta entrada que titulo ¨La Historia detrás de
mis Libros¨, a manera de historias cortas, se los compartiré. La historia de
hoy:
Se encontraba sentado en su
butaca escuchando al viejo profesor, no muy atentamente, la clase de literatura
era, en definitiva, una de sus predilectas, pero el hecho de ser la última
clase de la semana siempre le ocasionaba algo de somnolencia.
- - Bien, damos por terminada la clase – dijo el
profesor – pero antes de que salgan corriendo como simios, denle un vistazo a
la lista de libros asignados de este bimestre.
Cada semestre, todos los
estudiantes adscritos al taller de literatura debían leer al menos un libro
cada dos meses, asignado por el profesor a cada uno dependiendo de sus gustos
o, también, de aquellos géneros que aún no habían explorado personalmente, por
falta de interés.
Mientras todos se amontonaban en
el escritorio del maestro, él se quedó sentado en su lugar; ¨no tiene caso,
mejor espero a que se disipe el tráfico¨, pensó mientras cavilaba en qué tipo
de libro le habrían designado, ¨la última vez me dio uno de romance¨, recordó
torciendo el gesto; ¨lo bueno es que nunca repite género, así que otro libro
cursi no creo que sea¨.
- - ¿Cuál libro crees que te den esta vez? – le preguntó
su amigo sentado a su lado, sacándolo de sus reflexiones.
- - Conociendo lo impredecible que es el profe,
ni idea – contestó, esbozando una sonrisa.
- - Mejor será averiguarlo - le dijo mientras se ponía de pie.
Se encaminó hacia el lugar del
profesor y encontró su nombre en la lista, al lado estaba escrito: ¨Santa María
del Circo – David Toscana¨, nunca había oído hablar de tal título, no es como
que llevara muchos años leyendo ni que su lista de libros leídos fuera tan extensa,
pero visitaba tianguis y tiendas de libros usados con regularidad y nunca había
visto ese libro.
- - ¿Es reciente este libro profe? – preguntó,
señalando con el dedo el renglón donde estaba escrito su nombre.
- - No, ya tiene unos 6 o 7 años, pero su autor
apenas empieza a tomar fama – contestó el profesor reclinándose en su silla.
Eso era clásico del viejo profesor,
los libros que recomendaba a sus estudiantes eran de autores no muy conocidos, los
llamaba ¨joyas aún sin pulir¨, y así contribuía a que dichos autores cogieran
notoriedad.
Salió del salón algo consternado,
pues no sabía dónde conseguiría el libro, hasta ese momento su historia como
lector se resumía a libros usados, libros prestados o libros electrónicos en
¨pdf¨ que podía leer en su computadora, pero nunca, aunque pareciera difícil de
imaginar, había comprado un libro nuevo. En su caso, no porque no lo quisiera,
eran tiempos de ¨vacas flacas¨ en su casa y no podía darse muchas libertades
con el poco dinero que tenía. ¨Naa, no hay nada de qué preocuparse, seguro el
fin de semana lo encuentro¨, se dijo mientras tomaba el autobús hacía su casa.
Pasó el fin de semana y sin éxito
en su búsqueda, visitó todas las tiendas de libros de segunda mano que conocía
y recorrió los tianguis donde siempre había encontrado cualquier título que le
recomendaban; ¨hasta ahora¨, pensó algo afligido.
- - Bueno hijo, para todo existe una primera vez –
le dijo su madre después de platicarle la odisea, nunca había caminado tanto
sólo para localizar un libro.
- - En eso tienes razón – respondió casi en
automático.
No hay comentarios:
Publicar un comentario